
- Expresó Manuel Millones candidato a diputado independiente Partido Republicano por el Distrito 6 que comprende a las provincias de Marga Marga, Quillota, San Felipe, Los Andes y Petorca
“Se trata de un hecho simbólico pero a la vez, muy concreto. La reapertura de la Escuela la Greda de Puchuncaví no solo cierra uno de los capítulos más oscuros de episodios de contaminación en la zona, sino que además se transforma en el icono de la recuperación de espacios públicos en dicha comuna”, expresó Manuel Millones candidato a diputado independiente, Partido Republicano, por el distrito 6 que comprende a las provincias de Marga Marga, Quillota, San Felipe, Los Andes y Petorca.
“Tengo sentimientos encontrados, por cuanto el 2011 hubo dolor y frustración por tener que decretar el cierre de la escuela, para proteger a los estudiantes de los contaminantes y metales pesados, pero hoy con esta obra que aprobamos en su momento desde el Consejo Regional, se da vida a un centro cívico que será un espacio para la comunidad. Eso provoca alegría y a la vez una gran emoción por ser parte de la historia de lo que aquí se vivió”, explicó el ex consejero regional.
A mayor precisión Millones agregó que en su momento tuvo que cumplir dos roles: “Por una parte, como consejero regional, y por otra, como asesor del seremi de salud de la época, Jaime Jamett, con quien debieron enfrentar la crisis sanitaria y dar respuesta a las demandas de los habitantes, lo cual derivó en varias medidas, como el lamentable cierre de la antigua escuela La Greda y la construcción de un nuevo recinto”.
Además hubo que intervenir el Plan Intercomunal “reduciendo más de 500 hectáreas de industria peligrosa para destinarlas a áreas verdes. Esta reapertura de la escuela La Greda, hoy convertida en un recinto comunitario, debe ser un hito que nos recuerde por generaciones que el desarrollo nunca debe ser a costa de la salud ni bienestar de los vecinos, menos de los niños”.
Actualmente indicó Millones que “tenemos nuevas normas de emisión y las empresas también han contribuido a tener procesos más limpios en concordancia a las exigencias sanitarias y ambientales. Debemos tener claro que sí es posible cohabitar en un esfuerzo colectivo las actividades de las personas con la industria no peligrosa. Debemos seguir avanzando en la protección de las localidades, pero dando espacio a la inversión, trabajo y desarrollo con reglas claras, un plan regulador actualizado y una industria responsable con el medio ambiente”.