- Él se inició en el Club 5 de Abril de San Javier y recientemente fue distinguido por esa entidad, ya que es el único que a la fecha ha llegado al fútbol profesional
Francisco López Moreno, que jugó profesionalmente por Lister Rossel, Curicó Unido y Malleco, acaba de ser distinguido por el Club 5 de Abril de San Javier –donde se inició-, por ser el único que ha llegado al fútbol profesional.
Él se encarga de detallar su recorrido profesional: “Jugué en Lister Rossel los años 1972, 1973 y 1974. El año 1975 me compró Curicó Unido y estuve ahí los años 1976 y 1977. El año 1978 me compró Malleco y permanecí hasta 1979”.
Ese año tuvo una lesión muy complicada: “En esos tiempos lamentablemente no estaba la tecnología para diagnosticar qué realmente me había pasado en una de mis rodillas. Finalmente se diagnosticó que era una cortadura de los ligamentos laterales internos cruzados lo que me fue imposible volver a jugar”.
López al retirarse el año 1979 buscó otros horizontes: “Entré a trabajar en la Municipalidad de Curicó donde estuve allí por espacio de cuarenta años, desempeñándome como inspector municipal”.
OPERADO DE LA RODILLA
El año 2017 se operó de la rodilla: “Me pusieron una prótesis. Afortunadamente después de tantos años, imagínese encontré a una persona maravillosa que era el doctor Alvaro Reyes, de la selección chilena, que en paz descanse. El me envió a un alumno de él que había sido de la Universidad de Chile, como estudiante de traumatología, el doctor Sergio Castillo. Me fui donde él y la verdad es que no me podía haber mandado donde un médico tan prestigioso y espectacular como él. Me operó y en tres meses me tenía trabajando de nuevo, quedé espectacular hasta el día de hoy, gracias a Dios”.
GANÓ DOS MEDALLAS DE ORO
“Junto a José Novo, un puntero derecho de Unión Española y Deportes La Serena, fuimos los que hicimos los dos goles más rápidos del futbol profesional. Se premiaba el gol más rápido de la fecha. Él es uno de los dos jugadores que hizo el gol más rápido del fútbol profesional y yo soy el otro cuando jugaba por Curicó Unido el 76 y el 77. Un gol lo marqué contra Independiente de Cauquenes en esa ciudad y el otro frente a Magallanes en La Granja de Curicó. Daban una medalla de oro de 21 quilates (cien pesos oro), que lo entregaba Viña Concha y Toro”, relata con evidente satisfacción.
“A propósito de este hecho quiero comentar que yo provengo de San Javier, de una familia bien constituida, pero en esos años no era muy remunerable el trabajo. Mi papá era administrador de fundo y era una vida difícil para siete hermanos que éramos. Yo, en ese momento vendí una de esas la medalla y le compré un televisor blanco y negro, el más grande a mi papá y a mi mamá”.
A propósito del último encuentro de los jugadores de Lister Rossel, Fernando López expresó sus sentimientos: “El fútbol es de amistad de alegría. Hoy día no lo veo así. Lo veo distinto. Estamos hoy día reunidos acá jugadores de Lister Rossel de los años 68, 70. 73, 74, 75, 76, que después pasó a llamarse Deportes Linares y también hay algunos acá. Esto nos llena de orgullo y satisfacción porque a nuestra altura de nuestra vida, lo único que queremos es vivir tranquilos. Porque recordar es vivir y eso es lo que yo tengo muy atesorado en mi corazón. Eso es absolutamente verídico y así lo pienso también. Nuestra generación fue única. El respeto, la honradez, la admiración, el cariño, el aprecio por aquellos jugadores que nosotros admirábamos en esas fechas siempre va a existir. Nuestro cariño y nuestro aprecio es infinito, porque la amistad del jugador de antes no se compraba sino que se adquiría, porque había un respeto entre sí, entre los pares. Hoy día no es así Antes no se ganaba plata y en cambio los jugadores de hoy ganan cantidades que son impresionantes. Nosotros aprendimos otras cosas de la vida. El fútbol profesional nos llevó a otras cosas que creo son más importantes. Una responsabilidad absoluta, una honradez y un cariño por la actividad”.
CLUB 5 DE ABRIL
“Mi nacimiento como jugador partió en el Club 5 de Abril de San Javier. Jugué como mediocampista. Fui integrante de las series inferiores. Hace poco el club estuvo de aniversario y me invitaron, donde recibí un reconocimiento espectacular. Yo fui el único jugador de 5 de Abril que llegó al fútbol profesional. Hubo otros dos jugadores destacados como Tono Pradenas y Jaime Villagra, pero que no llegaron por equis motivos. Yo fui el único que salí de ese club y jugué ocho años en el profesionalismo. Nos hicieron una gran y un lindo reconocimiento. Yo atesoro mucho esos años de cabro chico, con los zapatos al hombro, con un frío tremendo y la pelota era distintas”, recuerda con emoción.
Hoy a sus 76 años de edad con buena salud se muestra agradecido de la vida, del fútbol y de formar una familia: “Eugenio Jara me llevó a Curicó y ahí conocí a mi señora, una gran esposa. Tengo tres hijos y seis nietos. Estoy agradecido de todas las ciudades en que he estado”.
En las fotografías grupales, López aparece agachado como segundo desde la izquierda
