
- Francisco Bartolucci Johnston, abogado
Resulta indignante tomar conocimiento que con dineros fiscales y a través del Fondo Nacional de Investigación Científica y Tecnológica se halla financiado la recientemente realizada “Escuela de Formación en Prácticas de Acompañamiento y Elaboración de la Violencia del Estado” organizada por el “Laboratorio de Estudios de la Violencia Institucional”. El curso estuvo centrado en la “represión estatal hacia la población civil movilizada” durante el estallido de violencia de octubre de 2019.
Corresponde alzar la voz para reclamar que con fondos – escasos por lo demás – destinados a la investigación científica se financien actividades de claro sesgo ideológico que buscan, una vez más, responsabilizar a los organismos policiales por haber legítimamente enfrentado la violencia demencial desatada por las fuerzas revolucionarias que en aquella oportunidad buscaban derrocar al gobierno legítimamente constituido.
En realidad, no hay novedad en el contenido, lenguaje utilizado y propósitos perseguidos por la actividad en comento, lo que resulta inaceptable es que se resten fondos destinados a la investigación científica para financiar la agenda de violencia política de los sectores más radicales de la izquierda y el progresismo.
La verdad es que estos sectores, muy bien instalados en el actual gobierno, han perdido toda moderación y, sin vergüenza, no trepidan continuar, a cualquier precio, con su objetivo de desprestigiar a la Fuerza Pública e instalar y legitimar las manifestaciones de violencia como método para alcanzar sus propósitos políticos, y evitar puedan estas ser reprimidas.